19 de junio de 2016

LA VISITA.


Hay días en que una visita inesperada puede cambiar nuestra vida....

Hoy os queremos presentar a Elisa, una señora que vive en soledad porque tiene miedo a todo: a las personas, a las arañas e incluso a los árboles. Por eso siempre está en casa encerrada, a oscuras. Lo único que la entretiene es limpiar la casa, así que a veces tiene que abrir la ventana para que entre el aire fresco. Pero cierto día no fue precisamente aire lo que entró volando hasta el salón.

¿De quién sería aquel extraño objeto que se había posado a sus pies? Seguramente no podía ser nada bueno, así que decidió quemarlo en el horno, aunque por la noche no pudo dormir pensando en ello. Al día siguiente un toc-toc en su puerta la alertó: era un niño buscando su avión de papel. Y aunque estaba un poco asustada, lo dejo entrar.


Ante su sorpresa, el niño empezó a entablar una agradable conversación con Elisa que le hizo recordar sus años de juventud, cuando la invitaban a bailes a los que iba con sus trajes bonitos, y fue entonces cuando se dibujó en su cara una sonrisa. Así, poco a poco, el niño se fue ganado el corazón de aquella solitaria señora a la que hacía tiempo que no ilusionaba nada.


Esta es la sencilla historia que se esconde entre las páginas de "La visita", un tierno álbum de la alemana Antje Damm, editado por Tramuntana editorial. Y es que a veces en la sencillez está la hermosura, como en el caso de este libro, en el que seguramente lo más interesante es la conjunción que la autora hace entre el texto y la imagen. 

Al comenzar la historia, se nos presenta la escena principal del álbum: el salón de la casa de Elisa (una ilustración muy original, a modo de cuadro-fotografía en tres dimensiones) en tonos grises, que representan la oscuridad que conlleva la soledad de Elisa. Pero conforme la lectura del texto va avanzando este escenario se va llenando poco a poco de color, coincidiendo con la llegada de Hugo, el niño protagonista, hasta acabar con un casa multicolor llena de alegría en la que incluso si nos concentramos, parece que podríamos oler el aire fresco que entra por la ventana.


(detalle del montaje del escenario
de la autora para La visita)

Ojalá dentro de poco nosotros tengamos la suerte de recibir una vista como esta....

JOSÉ CARLOS.