16 de septiembre de 2011

VEINTIÚN ELEFANTES EN EL PUENTE DE BROOKLYN.


En los últimos días se ha hablado mucho en los medios de comunicación de la ciudad de Nueva York, por razones que nos gustaría que jamás hubieran pasado. Tanta noticia me ha servido para recordar estos días mi primer viaje a esta impresionante ciudad y como me cautivó nada más pisarla... Pasear por Nueva York es una gran experiencia, sin duda. Visitar los edificios que tantas veces hemos visto en el cine, en tantas películas míticas,  es como de repente estar dentro de una de ellas, donde en cualquier momento, en cualquier café o esquina, puede aparecer algunos de sus protagonistas.

Son edificios emblemáticos muchos de ellos, y hay uno que identifica especialmente a esta ciudad: el majestuoso "Puente de Brooklyn". Pues bien, con tantos acontecimientos y recuerdos a venido a mi mente un libro centrado en este famosísimo puente que he rescatado de mi estantería: "21 elefantes en el puente de Brooklyn", de la editorial Juventud.


En este magnífico álbum ilustrado la autora, April Jones Prince, y el ilustrador, François Roca, nos traen una historia real, aunque con algunos toques de magia propia. Una historia asombrosa pero basada en hechos reales, los que ocurrieron una tarde neoyorquina del mes de mayo de 1884, justo cuando las interminables obras del puente de Brooklyn habían cesado. Segun las crónicas de la época, un fatal accidente hizo que los habitantes de la ciudad no quisieran cruzar el puente por un fuerte miedo a que no aguantara el peso.


Fue entonces cuando un prestigioso director de circo, Phineas T. Barum llevó a 21 de sus elefantes para que cruzaran el puente ante los ojos atónitos de los ciudadanos y comprobar así su aguante. Tanto autora como ilustrador han recreado en este libro esta mítica historia, consiguiendo a través de sus páginas transportarnos al Nueva York de finales del siglo XIX, para hacernos cruzar el puente de Brooklyn junto a estos majestuosos elefantes.


Un estupendo libro para acercar a los más pequeños a esta mítica ciudad, que espero poder algún día volver a visitar...

JOSÉ CARLOS.